Charlie se pone nervioso por todo. Para colmo, Dylan, el abusón del colegio, lo tiene entre ceja y ceja. Pero eso no sería tan terrible si no fuera porque los nervios hacen que Cha...
Charlie se pone nervioso por todo. Para colmo, Dylan, el abusón del colegio, lo tiene entre ceja y ceja. Pero eso no sería tan terrible si no fuera porque los nervios hacen que Charlie… ¡se transforme en un animal! En muchos, para ser exactos: pulga, paloma, rinoceronte… Además, se acerca la obra de teatro (en la que Charlie hace de Patata Triste número 1) y teme transformarse en plena representación. Por suerte, para lidiar con este nuevo (y rarito) poder, ¡cuenta con la ayuda de sus tres mejores amigos*! *Que también son bastante raritos.