Islandia, una isla poco poblada y abandonada en lo alto del globo, es un país literalmente en construcción, un vasto laboratorio volcánico con potentes fuerzas que moldean la tierr...
Islandia, una isla poco poblada y abandonada en lo alto del globo, es un país literalmente en construcción, un vasto laboratorio volcánico con potentes fuerzas que moldean la tierra: géiseres, burbujeantes pozas de barro, volcanes helados que retumban y glaciares que se abren paso entre las montañas. Lo prosaico se vuelve extraordinario gracias al poder de la naturaleza. Un chapuzón en una piscina se convierte en un baño en una laguna geotérmica, un tranquilo paseo, una excursión por un resplandeciente glaciar, y una serena noche de acampada, un asiento de primera para las auroras boreales o el rosado sol de medianoche.