Roger Federer, si no el mejor jugador de esta era dorada del tenis masculino sin duda el que ha tenido un mayor impacto deportivo y mediático, está en el ocaso de su histórica carr...
Roger Federer, si no el mejor jugador de esta era dorada del tenis masculino sin duda el que ha tenido un mayor impacto deportivo y mediático, está en el ocaso de su histórica carrera. A lo largo de estos años, ha cautivado a las audiencias por su gracia, tanto literal como figurativa, en la cancha, y por su inquebrantable simpatía en tiempos de escepticismo y negatividad. Pero detrás de esta elegante figura deportiva hay un ser humano con sus demonios y sus defectos, y ningún periodista lo conoce mejor ni está tan bien preparado para escribir este relato íntimo como Christopher Clarey, encargado de su cobertura en The New York Times y The International Herald Tribune durante más de dos décadas.