¡Mamá! ¡Los monstruos tenemos que asustar! Los niños sienten atracción por los personajes fantásticos y disfrutan creyéndose protagonistas de mundos imaginarios. Les permite vivir...
¡Mamá! ¡Los monstruos tenemos que asustar! Los niños sienten atracción por los personajes fantásticos y disfrutan creyéndose protagonistas de mundos imaginarios. Les permite vivir otras realidades, muy diferentes a las suyas.
Este cuento ensalza la implicación de los padres para potenciar la imaginación. Además, este monstruo inspira simpatía y afecto, por lo que es un buen modelo para ayudar a superar los miedos y corroborar que las apariencias engañan.